Egipto es el segundo país más desarrollado del continente africano. Cuenta con una economía diversificada que ofrece grandes oportunidades para las empresas extranjeras. A pesar del impacto de la Covid-19, la economía egipcia creció un 3,6% en 2020, gracias al equilibrio alcanzado entre la adopción de las medidas sanitarias para enfrentarse a la pandemia, la continuación de la actividad económica y sus políticas de desarrollo. Se espera que vuelva a crecer por encima del 5% en 2021. Sectores como el químico, el metalúrgico, desarrollo urbano o el de la gestión del agua, entre otros, disponen de significativas oportunidades en este mercado.
El objetivo de esta jornada es descubrir las últimas novedades operativas en las exportaciones a Egipto.