Décima potencia comercial y quinta plaza financiera del mundo, la economía de Hong Kong es, sobre todo, una economía de servicios, aunque bajo la tutela del régimen chino. Con un elevado poder adquisitivo, es altamente dependiente de las importaciones del exterior. Dispone del tercer puerto más activo del mundo en contenedores. Para las empresas valencianas constituye un mercado de oportunidad para los productos agroalimentarios y manufacturas de consumo de calidad e innovadores.